Las grasas saturadas de los huevos han estado demonizadas durante muchos años, ya que se creía que aumentaban el colesterol. Hoy se sabe que no todas son malas sino que depende del alimento del que provengan. De tal forma, que no hace falta restringir los huevos para llevar una dieta saludable, ya que éstos tienen fantásticas cualidades que ofrecer.